Cuentos para Mi

La realidad se mezcla con la imaginación, el sentir se confunde con los recuerdos, y estos son los relatos que avivan mis noches y mis sueños , Hoy los comparto contigo.....

Mi foto
Nombre: Sol Diez
Ubicación: Arica, Tarapaca, Chile

Desde los doce años que escribo, esta es la primera vez que publico y espero saber sus comentarios,las actualizaciones son semanales.

15 mayo, 2006

Canela. capitulo 2 , el demonio en el cuerpo.



Al pasar los años, Canela renuncio al sueño de seguir siendo niña y a regañadientes fue aceptando el mundo de los adultos, superando en ese paso la muerte de su padre y asumiendo la responsabilidad de ser madre de su madre y referente de su familia convertida en un matriarcado. Para las mujeres de esa familia era muy importante el como comportarse y Ella era lo que se enmarcaba en un ser socialmente aceptable, inteligente y culta, que a veces sorprendía para sus cortos años, de hecho su mundo de conversaciones y círculo de amistades se desarrollaba entre adultos mayores y se distanciaba enormemente de sus primos y hermanos, que gozaban de la irresponsabilidad de la juventud, pero tanta responsabilidad termino ahogándola y comenzó a llevar una doble vida.

Fue así como comenzó a entrar en el mundo del sexo, como un desahogo, Había comenzado como un juego de sólo tomarse la mano y algún beso robado por aquel niño que ni siquiera recuerda su nombre, los besos la llevaron a las cálidas caricias, más audaces, debajo de su blusa en buscaba de sus pequeños senos y, ella sintiendo como su menudo cuerpo empalaba a su amigo de turno, cuando la abrazaba en aquella jauría de manos y lenguas fue entrando en la espiral de la vida. La primera vez fue a los quinces años después de dos meses de besos y caricias, irresponsablemente, pero gozosamente se entregó, extrañamente sintió el poder que tenía sobre los hombre.

Desde ese momento los encuentros y desencuentros marcaron su vida y sus demonios, sus juegos eróticos no tenían límites, daba lo mismo un conocido o un extraño. Sabiendo que su cuerpo había cambiado y no consciente cabalmente de sus atributos, jugaba con fuego.

Su casa cada verano, por estar en la costa se llenada de amigos y parientes que huían de las ciudades solas y aburridas. Uno de esos veranos, cuando se empinaba cerca de los 16 años, llegó un primo mucho mayor que ella, ya casado que aprovechó de visitarlos debido a que su familia se encontraba cerca de la ciudad, como todos los dormitorios estaban copados, le tocó dormir en el cuarto de las niñas, como tiernamente le decían a Canela y su hermana menor, le acomodaron una cama cerca del camarote que les tocaba compartir a las hermanas por ese tiempo. El calor y la humedad de estar cerca del trópico era insoportable incluso de noche, por lo que se dormía con apenas las sabanas y algo ligero sobre el cuerpo, Canela lo hacía con una polera muy delgada casi transparente, y una pequeña tanga que enmarcaba sus glúteos firmes y redondos tras sus piernas largas, delgadas y torneas, con su piel doraba por los rayos del sol que la acariciaban tarde a tarde en la playa. La primera impresión de este hombre fue maravillarse al ver en que se había convertido esa niña que hacía más de una década no la veía. Sus ojos no se despegaban del cuerpo que tenía al frente, luego que entrará al cuarto después de la ducha, adivinando y comenzando a desear lo que tenía debajo de la toalla que la envolvía y que llegaba hasta sus muslos, Canela le pidió que le alcanzará la blusa que estaba bajo la almohada, mientras que de la cómoda sacaba su tanga y se la colocaba como si él no estuviera. Despertando del momento, se acercó lo que más pudo y olió su fragancia al pasarle la blusa, dejando su respiración entrecortada en su cuello, erizando sus bellos, en ese instante despertó su demonio y comenzó el juego.

Se dejó caer sobre la cama para comenzar a ver una de las películas que repetían todos los veranos en un televisor pequeño que tenía sobre el ropero, boca abajo y abrazada a un cojín, se movía suavemente, sabiendo que la observaba con el deseo contenido, comenzaron sus manos a acariciar sus pies y sus pantorrillas; cada cierto tiempo como sin importar que estuviera él, ella se levantaba a cambiar de canal, y para alcanzar el televisor debía empinarse por lo cual su tanga se veía en toda su magnitud, nuevamente volvía a la cama, que para volver debía pasar cerca de él, y lo hacía muy cerca para rozarle como si fuera sin intención, sintiendo como ese hombre ardía de deseo, tratando apenas de controlar y, esto a Canela le causaba unas sonrisa maliciosa a la vez que sus ojos brillaban.

Habían otras noches, cuando llegaba él tarde, Canela le esperaba como si estuviera durmiendo, dejando ver su cuerpo semidesnudo, sabiendo que contendría las ganas por tocar aquel cuerpo, allí él se quedaba un buen tiempo, sin emitir sonidos, y ella sólo sentía los resoplidos ardientes que trataba de silenciar para que ella no lo escuchará, y el juego duró todo el tiempo de su visita. La última noche, después de la despedida oficial de su primo , ya muy tarde, Canela lo sorprendió dándole un beso jugoso y caliente como despedida, dejándole que acariciara por primera vez su cuerpo, sin dejarlo decir nada, para marcar en él el recuerdo de un verano que jamás olvidaría y que mucho tiempo después le confesaría a ella.

5 Comments:

Blogger Nanicita said...

Saludos

=)**

8:17 p.m.  
Blogger Andres said...

Que bella sorpresa de saber que estas de vuelta Sol. Como siempre tus relatos llenos de sensualidad. Desbordas pasión en tus letras.

5:47 p.m.  
Blogger Elías ... said...

te xtrañamos....que pasa q ya no estas??

un beso y un abrazo

9:52 p.m.  
Blogger Gabriela235 said...

Malvada...
Jajajaa
Yo también he jugado a eso...

12:24 a.m.  
Blogger Nieves said...

Hace un día acabo de leer tu historia de Un viejo amor, lo que me llevo a pensar en que pensamos lo mismo, soy una apasionada poeta, y lo que escribes tiene sentimientos y razones que solo uno mismo entiende, y leer estos escritos me hace pensar en que El Don de escribir existe.
Espero seguir leyendo mas de tus escritos y que no termine ese buen tacto para escribir.

9:21 a.m.  

Publicar un comentario

<< Home