Secretos de tres
Con la idea secreta de realizar ese trío de amantes, comencé a buscar más la amistad de Alex, y cada vez que podía llegaba a su lado, comenzaba mi rollo con ella, así despacito, sutílmente, entre miradas cómplices y ardientes. Mientras tanto, Jorge fue más frontal y cuando pudo y el momento se dio , le preguntó sin rodeo, a mansalva, que opinaba del asunto de los tríos, a ella también le gustaba la idea, y comenzó un coqueteo con la idea y con él, no le dijo ni que si ni que no, como todo hombre, Jorge pensó que estaba listo, y apuro las cosas, le pidió que se decidiera y en la tarde le dijo no, ella busco excusas, no quería darle el corte definitivo a la conversación, ella necesitaba saber si yo estaba de acuerdo, le fascinaba la idea del peligro, le excitaba y se le notaba , pues ella lo había planteado alguna vez realizarló con su antigua pareja , siendo ella quien invitaba, un poco desmotivado Jorge me lo comunicó . Yo, en cambio, intuía que siempre quedaba una posibilidad, comencé por otro lado, ya que también tenía ganas de hacer el amor , teniendo la experiencia con algo de hierba en el cuerpo, por ese lado empecé a tramar esta historia , en nuestras conversaciones, ella me habría hablado más de una vez de sus experiencias , lo que me exitaba mucho más, poco a poco comencé a hacerla cómplice de ésta nueva experiencia que quería realizar, conseguí que ella me la comprará , debo ser sincera que por un lado me atraía la idea y por otro me aterraba, así la fui involucrando, ella me tenía que ayudar para ésta primera vez , sabía lo que yo pretendía , pero el juego peligroso la atraía más, además de realizar, de cierto modo, nuestras fantasías, sin comprometerse lo aceptaba, el tiempo jugaba en mi contra y se terminaba el verano, yo tenía que regresar a mi trabajo , a mi ciudad y decidí descansar unos días de la actividad extra del verano y deje de tener contacto a diario con ella, el día martes antes de regresar, pasó por la casa, en el minibús de la empresa, como había mucha gente, cruzamos algunas miradas y supe que lo había conseguido, le dije que pasaría a su casa luego.
Llegamos como las 11 de la noche a buscarla, Jorge no podía creer que yo tomará la decisión,yo estaba segura que ese día por fin haría realidad mi fantasía , la de él y por supuesto la de Alex . Jorge no estaban tan convencido pero igual me siguió el juego, la pasamos a buscar y le dimos varias alternativas, al final compramos unos pack de cervezas y nos fuimos al cerro.
Yo estaba nerviosa debo confesarlo, pero también ansiosa, la conversación al principio fue del clima, de la ciudad, de la familia, luego pregunté como se fumaba , y me dio algunas clases, luego repartimos las cervezas , ella se encontraba en la parte de atrás en la camioneta y nosotros adelante, nos acomodamos de tal forma que nos veíamos todos, le ofrecimos a Jorge fumar y el no quiso. Después de un buen rato, Jorge propuso ir a un lugar más cómodo , nos fuimos a unas cabañas, frente al pueblo donde vivíamos , llegamos y solicitó un departamento para descansar , estas eran cabañas para veraneantes, pero era un motel disfrazado, el cuarto era pequeño pero acogedor , la cama estaba en el centro al lado una mesa redonda donde dejamos las cervezas y los cigarrillos, Alex le pidió a Jorge que fuera al baño, para dejarnos un rato a solas, hablamos tonterías sentadas en la orilla de la cama, pero nos mirábamos y estoy segura que ambas nos preguntábamos como empezar. Cuando Jorge llegó, no hubo tiempos de palabras, la tomo a ella y la atrajo hacia el centro de la cama, la comenzó a besar delante mío , me sorprendió , ella le respondió mirándome de reojo, las manos de él buscaron sus pechos redondos, duros , que alcanzaban en esas manos enormes de Jorge, bajo su top con fuerza, quedaron al aire su pezones erectos y oscuros que se empinaban en sus senos blancos, ella desabrocho la camisa de él, mientras buscaba su sexo entre el pantalón, el sonido de sus respiraciones llenaban el cuarto y yo desde un rincón los observaba , sus cuerpos se juntaban y se refregaban, al principio no atinaba a nada, era alucinante verlos, me sentía extraña, y no por lo hierba que al final fue un fiasco, él estaba ahí intentando atinar con otra, me acerque y saque sus ropa , Jorge había ya adelantado bastante con la de él, ella se dejó terminar de desvestir por mi, mis manos rozaron su piel suave, blanquísima, los contornos de su cuerpo tenían tal simetría en relación a su porte que sentí deseos de acariciarla horas como solo una mujer lo sabe hacer, ella me miraba intensamente y sus gemidos se hacían cada vez más fuertes cuando teníamos contacto, entonces me besó, fue profundo, sin coqueteos, buscando darme placer en cada lugar donde su lengua tocó, me perturbó la sensación y comencé a sacarme la ropa con ayuda de ella, retrocedí y ahí los vi, mientras sus manos pequeñas y delicadas recorrían mi cuerpo, él arremetió con su verga tiesa y roja, se subió sobre ella y comenzó a cabalgarla, yo me acerque y le bese su rostro, sus labios ,su boca , me hundía en ella, su lengua jugaba con la mía, me puse torpe, me demore varias minutos , estaba embobada mirando como mi hombre le encallaba su miembro, si su miembro que era mío a otra mujer, escierto que sentí celos pero también me calcinaba con esa escena, me puse a su lado y la bese desde su boca hasta sus pechos, quedándome un instante en sus pezones , luego desde sus pechos hasta su vientre concavo, se escuchaba solo gemidos y respiraciones aceleradas y, todo olía a sexo, aparte a Jorge y baje hacia su vulva ,depilada con sumo cuidado, y a mi manera comencé a penetrarla con mi lengua , busque su clítoris, se lo mordisqueaba suavemente y sentía el placer que le provocaba, Jorge nos miraba maravillados con nuestra batalla , a ratos competíamos por esa vulva, ella insistía en besarme a mi y no a Jorge, eso si que dejaba que él la penetrará y le pedía que fuera con violencia, sus gemidos a mi y a él nos calentaban aún más, de vez en cuando cruzabamos miradas con Jorge y yo sabía lo que él quería, la puso sobre mi y la envistió por detrás , entonces ella buscó mi sexo húmedo y palpitante, lo abrió con su lengua y bebió de él, provocando que yo temblará y convulsionará a cada estoque de su lanza, por la placer que me causaba. Luego le toco a Jorge ser el objetos de nuestros juegos, a ratos nuestras manos, las de ella y las mías se juntaban en su pecho, sus brazos y sobre su sexo , nos miramos y compinches bajamosal mismo tiempo, casi como leonas salvajes nos abalanzamos sobre su pene enhiesto para que nuestras bocas devoraran cada centímetro de su envergadura, él gozaba de la situación y lo sentíamos a través de sus quejidos, volvió entonces a penetrarla, mientras yo me masturbaba al lado de ellos, y les acariciaba, ella le dijo ahora hagáselo a ella, me penetró, ella ahora nos miraba …………
3 Comments:
Gracias por tu preocupación, me dejaste helada. Pero si lees mi nuevo post, verás que ya se me pasó.
Gracias, de verdad.
Gracias de nuevo.
latras de mujer, fantasias de hombre..genial.
Hace tiempo que no te visitaba por estos lares de la erótica vida, pero acá estoy leyéndote y disfrutando lus cuentos.
Esto es ficcion no?...
sigo tu senda...
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